ECOLOGISTAS EN ACCIÓN DENUNCIA A LA CONFEDERACIÓN HIDROGRÁFICA DEL EBRO

POR SECAR EL RÍO QUEILES

Ecologistas en Acción quiere denunciar públicamente (además de poder utilizar otras vías) que durante los días 16 y 17 de mayo del 2002 , la Confederación Hidrográfica del Ebro dejó totalmente secos más de 40 kilómetros del río Queiles.
El corte, al parecer, se produjo en el azud de derivación a la presa del Val y se debió a unas obras de encoframiento que está realizando la Confederación Hidrográfica del Ebro aguas arriba de los Fayos. Este corte afectó a los 40 kilómetros de río que se encuentran entre este punto y la desembocadura del río en el Ebro, pues este río carece en ese tramo de afluentes importantes, que con su caudal pudieran suavizar las afecciones producidas y a la existencia de varias captaciones para regadío que detraerían el poco caudal existente en cada momento.
No se ha respetado ningún caudal ecológico desde el punto donde se desarrollaron las obras, ni siquiera el irrisorio caudal que se marca en el Plan Hidrológico de la Cuenca del Ebro a partir del azud de Vozmediano. El corte de agua ha supuesto un grave daño para la poblaciones piscícolas del río. Precisamente, la población de truchas, una de las pocas de toda la comunidad que se mantienen con características autóctonas, se ha visto afectada de manera importante, han sido muchos los vecinos de los pueblos ribereños que han aprovechado para recoger ejemplares para su consumo, antes de dejarlos
morir por asfixia, recolectándonlos a mano, sin ningún problema por la ausencia casi total de caudal en el río.
Por el contrario, no se ha observado ningún dispositivo del Gobierno de Aragón o de la Confederación Hidrográfica del Ebro, para minimizar el daño a la fauna piscícola. Hay que tener en cuenta que un tramo afectado (el situado entre Tarazona y Murchante) está recogido como de interés ciprinícola, de acuerdo a las estipulaciones recogidas en la Directiva 78/659/CEE, relativa a la calidad de las aguas continentales que requieren protección o mejora para ser aptas para la vida de los peces. En el momento que se produjo el corte estaban bajando por el río más de 1600 l/s (como mínimo), lo que ha supuesto una grave afección a una fauna que disponía en ese momento de un caudal importante, no teniendo tiempo para adaptarse, como se produciría en una estiaje natural. Todo el caudal fue trasvasado al embalse del Val, sobre el río del mismo nombre, no produciéndose ninguna suelta desde este embalse, para intentar recuperar el nivel de las aguas a partir de la unión del Queiles y del Val.
Igualmente se han visto afectados otros usos como el agrícola al no poder abastecerse las múltiples acequias que derivan el agua a las zonas de regadío situadas a lo largo de todo el tramo medio y bajo que se ha visto afectado. Ecologistas en Acción quiere denunciar que se ha observado una total improvisación a la hora de producirse el corte de agua, no estando planificado ni coordinado entre las diferentes administraciones involucradas, no tomando por ello ninguna medida
preventiva o correctora.
La futura construcción de una balsa “colchón” aguas abajo de los Fayos, puede conllevar nuevas detracciones importantes del caudal del río. Por lo que a juicio de Ecologistas en Acción se espera que las obras previstas se efectúen dentro de un plan de actuaciones público y coordinado y que no vuelva a repetirse, por tanto, la chapuza con graves repercusiones medioambientales que se denuncia en el presente comunicado. El impacto sobre los peces del río hay que añadirlo al producido recientemente en el embalse del Val donde se han soltado (desconociendo los responsables) cientos de ejemplares de varias especies alóctonas.

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